que era una princesa
y llegó a está reflexión o tal vez
a un monologo:
Nacer es un milagro de la vida,
llegar a la niñez es un privilegio.
Vivir en adolescencia es el momento en el que
piensas que lo puedes todo...
y ya cuando eres adulto te quieres llevar
el mundo por delante...
Llega un momento en que ves tu vida
como una película y recuerdas quien eres...
eres un ser maravilloso. Pero hay
quienes que, por una u otra cosa,
cambiaron su vida...
Hoy es mi historia, mi vida,
mis sentimientos... y aquí estoy
en la gracia de Dios...
Es una reflexión mía, tal vez absurda,
equivocada, pero así lo viví...
Nací, crecí con amor. Tuve una
infancia feliz pero faltó algo y
aún no lo sé. Busco en mis recuerdos
y nada..
En la adolescencia buscaba ese algo
y nada...
Ví a Dios en mi primer hijo,
en el segundo y en el tercero;
lo di todo por ellos, fuí madre
y me olvidé de ser mujer..
Hoy no me pesa y a mi manera soy feliz.
Ya con nietos, que es otra bendición más...
Dios está en mi, le doy infinitas gracias...
Pasa el tiempo y yo busco aún
y nada...
Qué será ese algo que no olvido y no sé?...
Hoy en día, en casi mi ocaso,
voy perdiendo mis habilidades,
y doy gracias a Dios...
son tantas cosas que no quiero aburrir
a nadie, estoy quedando ciega, casi no veo
entre otras cosas más...
Ya lo comenté y siento que pasé a un segundo
o tercer plano, no me oyen, no me escuchan,
no me ven, ya dicen: "pobrecita, está loquita"...
Yo me río y pienso que Dios es bueno, porque lo es.
Dios bendiga a mis hijos...
los amo a todos y siempre estarán en mi...
M@R...
Marlene Urdaneta.
Mucho que contar... Nada que decir..
Mucho que contar... Nada que decir..
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